Es muy alta la piratería musical en Argentina

En 2006
se bajaron de Internet 608,5 millones de canciones sin pagar derechos


Durante 2006 se descargaron en Argentina 608,5 millones de canciones desde
Internet sin pagar derechos, según un estudio de Mercado de la música digital realizado por CAPIF

La Cámara Argentina de Productores de Fonogramas y Videogramas (CAPIF) presentó los resultados de su estudio de mercado sobre música
digital, realizado por la consultora Knack. El estudio se dividió en 3 módulos para abarcar los aspectos de manera cualitativa y
cuantitativa. Para el abordaje cuantitativo se realizaron encuestas sobre una muestra de 600 “bajadores de música” (aquellos que
descargaron desde Internet al menos una canción en el último mes) de entre 11 y 35 años, de Capital Federal, Gran Buenos Aires,
Rosario, Córdoba, Mendoza, Neuquén y Tucumán. Mientras que para conformar los aspectos cualitativos se trabajó en base a 6 grupos
focales y 9 entrevistas en profundidad realizadas a expertos sobre música y tecnología.

El estudio estima que, durante el 2006, los argentinos descargaron 608 millones y medio de canciones desde Internet a través de
programas que permiten el intercambio de archivos musicales no autorizados, en la mayoría de los casos, infringiendo las leyes de
propiedad intelectual.

Este número muestra un incremento con respecto a las descargas estimadas durante el 2005 (412 millones), aumento que se debe al
crecimiento de los abonos de banda ancha en hogares, pero también la explosión y consolidación de los cibercafés, como lugares de
conexión y descarga.

El estudio muestra que el 62% de los “bajadores” se ha iniciado en el último año, y que este número se compone principalmente de lo
que el estudio llama “bajadores intermitentes”, caracterizados por pertenecer a NES más bajos, con una frecuencia de bajada menor a
una vez por semana, y que baja en promedio 5 canciones por semana desde locutorios o cibercafés. Opuesto a este perfil se encontraría
el “bajador permanente o histórico” que es aquel perteneciente a NES alto/medio alto, que accede desde su hogar a través de conexiones
de banda ancha, cuya frecuencia de conexión y bajada es diaria y llega a bajar un promedio de 28 canciones por semana. Es por esta
razón que, a pesar de haber aumentado la cantidad de personas que tiene el hábito de bajar música desde Internet, el aumento en el
número de canciones no es directamente proporcional.

En todos los casos, la música aparece como el uso principal que se le da a Internet (95%), seguido por el envío de e-mails (80%) y el
Chat (78%). Y el género más escuchado es rock nacional o en español.

La gratuidad no surge como única razón de las descargas a través de programas p2p; sino que aparecen argumentos que tienen que ver con
una nueva relación y nuevos modos de consumir música donde los motores de búsqueda dejan de ser bandas, artistas o álbumes y pasan a
ser las canciones; y no solamente las canciones favoritas, o de un mismo género, sino que prevalecen la mezcla y la elección ecléctica
de los temas favorecidos por la comodidad tecnológica: “Desde que tengo banda ancha dejo la compu encendida toda la noche bajando
música”, es una de las frases que surgió de los grupos focales y que explica esta nueva forma de consumo.

En esta nueva relación con la música, el 60% de los entrevistados dijo estar de acuerdo con la idea de que “mis discos preferidos
prefiero tenerlos en CDs originales”. Sin embargo, el 31% manifestó que no le interesa tener CDs originales. A pesar de esto, según lo
manifestado de manera espontánea por los entrevistados, en los últimos tres meses compraron en promedio 1.36 CDs originales.

Uno de los puntos del estudio indagó sobre la percepción del carácter ilegal de distintas formas de adquirir música. El 75% de los
entrevistados manifestó conocer que comprar un CD en un puesto callejero es ilegal, el 54% reconoció que la copia de un CD original a
un CD virgen es ilegal, y un 44% dijo reconocer que bajar canciones gratis de Internet infringía la ley.

Al mismo tiempo el 63% de los entrevistados manifestó saber que esta última práctica perjudica directamente a los artistas. El 54% de
los bajadores se mostró de acuerdo con que el uso de los programas para compartir archivos sin pagar derechos trae aparejados virus y
otros problemas de seguridad informática.

El estudio confirma que la Argentina, como es tendencia mundial, está frente a un proceso de cambio en relación a los accesos y a las
formas de escuchar música, lo que representa una gran oportunidad para el desarrollo de nuevos modelos de negocio para la industria
musical.

CAPIF

admin
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