Brasil vincula su ciencia a la producción

En la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF) habló el ministro de educación de Brasil, Aloizio Mercadante Oliva, explayándose sobre educación, ciencia y tecnología ante la crisis internacional y en defensa del desarrollo nacional.

 

 

Resumiendo su opinión Aloizo Mercadante Oliva expresó: “Debemos tener una política científica vinculada a la producción creando estímulos para que el sector privado sea cada vez más competitivo en las áreas estratégicas”

 

 

 

Aloizio Mercadante Oliva nació el 13 de mayo de 1954 en Santos, Sao Paulo. Se graduó como economista de la Universidad de Sao Paulo. En 1980, fue uno de los fundadores del Partido de los Trabajadores. En el 2002, fue el coordinador de la campaña presidencial que lo llevó a la victoria a Lula Da Silva; y también fue senador por el Estado de Sao Paulo entre el 2003 y el 2011. De 2011 a 2012 fue Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación en Brasil, y en 2012 se convirtió en Ministro de Educación.

 

 

 

Ante un auditorio desbordado de docentes, investigadores, estudiantes, graduados y autoridades de la universidad, el ministro Mercadante Oliva abordó las líneas estratégicas del desenvolvimiento de Brasil respecto a la ciencia, tecnología y educación, la actual situación económica y financiera frente a la crisis internacional, las políticas para el desarrollo de producciones científicas; las políticas para enfrentar la situaciones de pobreza y alfabetización; la inclusión digital en las aulas y las políticas de ingreso para las universidades públicas y privadas..

 

 

 

Aníbal Jozami, rector de la UNTREF, expresó la satisfacción de recibir al Ministro de Educación de Brasil y destacó “la UNTREF ha tenido un rol pionero en la discusión y en la creación de un espacio académico latinoamericano por la reafirmación del MERCOSUR”.

 

 

 

El ministro Mercadante detalló el contexto económico de Brasil, haciendo especial hincapié en las políticas que permitieron reducir la tasa de desempleo (actualmente Brasil tiene 6% de desempleo); en el incremento de 2 millones de empleos por año y en bajar la tasa de pobreza (en 1990, era de 20% y en 2009, de un 7.3%). Detalló que en los últimos dos gobiernos 40 millones de personas salieron de la pobreza e ingresaron en el consumo de masas. “Este mercado interno de consumo de masas es el factor predominante para sustentar el crecimiento económico en el cuadro de crisis internacional”, sostuvo Mercadante.

 

 

 

Aseveró que “no hay otro camino que invertir en la educación, ciencia, tecnología e innovación como eje estructurante de desarrollo. El gran desafío histórico consiste en construir las bases de una economía del conocimiento y la información, avanzar en una economía creativa y sustentable, y fortalecer el mercado de consumo de masas y la distribución del ingreso”.

 

 

 

Mercadante detalló a la importancia que tiene la producción científica como uno de los motores fundamentales para el desarrollo del país: “desarrollamos la producción científica académica y estamos creciendo fuertemente en las publicaciones académicas pero necesitamos invertir más en ciencia y tecnología aplicada a la producción. Tenemos que transformar nuestra producción científica en patentes, en derechos intelectuales. Estamos fomentando mecanismos de estímulos para que los investigadores registren sus patentes y crear una cultura de innovación”.

 

 

 

El mayor énfasis de Mercadante en su presentación, fue cuando señaló que era necesario producir e innovar a nivel local a través de fomentar investigaciones y crear un estímulo para la producción en sectores privados. “Tenemos que romper una cultura pasiva respecto al desarrollo de la tecnología, no podemos aceptar que las innovaciones son traer una máquina o una idea de un proceso de producto que viene de afuera, tenemos que tener una política ofensiva de producción tecnológica, de innovación, de investigaciones, y crear industrias, fomentar empresas de base tecnológica, crear un estímulo al sector privado; sino nunca seremos competitivos en las áreas estratégicas y siempre estaremos atrasados en el proceso histórico. Investigaciones y desarrollo tienen que ser desarrollados desde el ámbito público y el privado”, sostuvo.

 

 

 

“Creo que ciencia, tecnología e innovación en la educación es el elemento más decisivo para dar un salto en términos de calidad, de productividad y de competitividad. Si queremos mejorar las condiciones de vida y la situación del mercado interno, tenemos que ser competitivos no solo en la agricultura, la minería y el petróleo, sino en los sectores que dan valor agregado: tecnología e innovación son las cadenas del futuro. Por eso yo creo que América Latina y el MERCOSUR debe colocarla como una prioridad para poder avanzar y sobrellevar esta etapa de crisis”, agregó Mercadante.

 

 

 

Al referirse a las problemáticas sociales de su país, Mercadante detalló las políticas para atender a los niños (2,4 millones de chicos pobres, de 0 a 5 años) a través del programa de becas, de construcción de establecimientos educativos y del mejoramiento de capacidades cognitivas. También se refirió a la importancia de la inclusión digital en las escuelas y mencionó que se está haciendo un “esfuerzo” por distribuir un millón de tablets para los maestros y que cada alumno tenga una computadora. “El pizarrón es un instrumento del siglo XVII. Los jóvenes son nativos digitales del siglo XXI. La escuela tiene liderar el proceso de inclusión digital. La tecnología no va a sustituir la relación maestro-estudiante, pero es un instrumento nuevo  e indispensable”.