¿Cuál sería el mejor sueldo para mamá?

La Argentina es única en celebrar el Día de la Madre en octubre mientras la mayoría del mundo lo hace en mayo. Aunque el calendario es ampliamente diverso, basta solo dar una mirada a la pagina de Wikipedia y ver cuán distinta es la elección. Y ya en Internet y entre las páginas dedicadas a este festejo, me atrajo lo escrito por la maestra y bloguera española Concepción Ruiz quien en su artículo toma el ángulo de ¿cuánto debería ganar una madre por las tareas hogareñas, comparado con el sueldo de su empleo fuera de su casa?
Concepción Ruiz refiere que “desde hace 12 años el portal salary.com realiza anualmente una interesante encuesta a 8.000 madres estadounidenses para determinar el sueldo que debería recibir cada una de ellas por el tiempo que dedica a las 10 tareas o funciones más habituales de las que se encarga en casa si estas fueran igualadas a reconocidas categorías profesionales, las cuales este año fueron.
#10. CEO (Directora ejecutiva): 12,8 horas/mes
#9. Operaria de lavandería: 25,2 horas/mes
#8. Sicóloga: 30,4 horas/mes
#7: Operadora sanitaria: 59,3 horas/mes
#6. Chófer: 31,6 horas/mes
#5. Operadora de ordenador: 35,6 horas/mes
#4. Encargada de instalaciones: 42,8 horas/mes
#3. Profesora apoyo escolar: 54,8 horas/mes
#2. Cocinera: 55,6 horas/mes
#1. Empleada de hogar interna: 59,2 horas/mes

“Según el estudio y haciendo el promedio en base a las anterior top 10 de quehaceres domésticos se puede concluir que una madre que trabaja en casa acumula 94,7 horas semanales, de las cuales 54,7 serían horas extra. El salario medio que le correspondería sería de 7 164 Euros /mes.
“Las madres que trabajan en y fuera de casa ganarían menos por sus quehaceres domésticos a los cuales dedican una media de 57,9 horas semanales sin contar, claro está, al menos sus reglamentarias 37,5 horas semanales de jornada laboral fuera de casa. Su remuneración ascendería a 2 878,92 euros mes que habría que sumar a su nómina por contrato.
(fin de la cita de Concepción Ruiz)

Y llegado a este punto no puedo menos que preguntarme, a la luz de las dificultades económicas y financieras que atraviesa Europa, si esos valores mantienen vigencia o se han hundido aún más, atento a que la paga del trabajo femenino siempre ha sido menor al de los varones. Y no es que en todos los casos estos sean magnánimos, sino veamos:

Porque el “diferencial salarial” llega a ser de un 10 a un 30 por ciento en detrimento de las mujeres, incluso en los países que están más avanzados en términos de igualdad de género. Que las mujeres trabajan más que los hombres en casi todos Los países y que son ellas quienes siguen realizando la mayor parte del trabajo no retribuido. Sin embargo, en la mayoría de las profesiones femeninas se interpone un “techo de cristal”.

La doctora Mabel Burin define “Se denomina así a una superficie superior invisible en la carrera laboral de las mujeres, difícil de traspasar, que nos impide seguir avanzando. Su carácter de invisibilidad viene dado por el hecho de que no existen leyes ni dispositivos sociales establecidos ni códigos visibles que impongan a las mujeres semejante limitación, sino que está construido sobre la base de otros rasgos que por su invisibilidad son difíciles de detectar.”*

Y en la misma dirección Mabel Burin resalta que “el trabajo de muchas mujeres en espacios tradicionalmente masculinos es observado de forma más inquisitiva que el de sus compañeros varones. Se les exige un nivel de “excelencia”.” Y, además, está siempre presente “La doble carga: es conocido que las mujeres profesionales hacen malabarismos para compaginar su trabajo fuera de casa con las tareas domésticas, a menudo de forma unilateral.”

Según un trabajo publicado por la OIT, que agrega a esa limitante invisible señalada por Burin que, “este estudio se ha visto limitado debido a la ausencia de datos de países que no reúnen en forma sistemática informaciones precisas sobre las mujeres en puestos profesionales y de dirección, o que tienen un acceso restringido al Internet.”

“Las Tendencias Mundiales del Empleo de la OIT (2003) -dice el estudio- indican que las mujeres continúan teniendo menores índices de participación en el mercado de trabajo, mayores tasas de desempleo y significativas diferencias de remuneraciones, en comparación con los hombres. Las mujeres representan más del 40 por ciento de la fuerza laboral en el mundo, aproximadamente el 70 por ciento de las mujeres en los países desarrollados y el 60 por ciento en los países en desarrollo.
“Igualmente, se han registrado pequeños cambios respecto al porcentaje de
su participación en los empleos profesionales en estos últimos años. Las
mujeres ocupan alrededor del 30 al 60 por ciento de los empleos profesionales en la muestra de países para los que se dispone de datos actualizados.
“Esto representa un incremento del 0.7 por ciento entre 1996-99 y 2000-02.
Sin embargo, subsisten variaciones considerables entre los porcentajes de
mujeres en diferentes clases de empleos profesionales”.

Para nuestra vecindad latinoamericana, el BID pone de relieve que la mujer latinoamericana y caribeña: más educada pero peor pagada. No es un dato menor y palpable en toda realidad cercana donde vemos siempre a las mujeres esforzarse más que los varones por superarse. Pero aún así, “pese a tener más años de educación que los hombres, las mujeres aún se concentran en ocupaciones peor remuneradas como la enseñanza, la salud o el sector servicios. Al comparar hombres y mujeres de la misma edad y del mismo nivel educativo, los hombres ganan un 17 por ciento más que las mujeres en América Latina. La brecha salarial ha venido cayendo en los últimos años, pero a un ritmo aún lento. Cambiar los roles en el hogar y los estereotipos son esenciales para lograr igualdad de género en el mercado laboral. La diferencia salarial entre hombres y mujeres en América Latina, pese a su reciente reducción, aún es prevalente”, señala el estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) titulado “Nuevo Siglo, Viejas Disparidades” que compara encuestas de hogares representativas en 18 países de América Latina y el Caribe.

El estudio apunta que “igualar la licencia de maternidad y paternidad podría ayudar a nivelar el campo de juego con respecto a las decisiones de contratación de hombres y mujeres. Así mismo, alentaría a los hombres y mujeres a dedicar más tiempo a sus recién nacidos, generando toma de decisiones más equitativas.” Y, para finalizar, no olvido que el motivo fue hablar del Día de la Madre. Algunos datos dicen que los restaurantes de Buenos Aires están a full -un aumento de reservas del 800% respecto a otros domingos- para este domingo 21 en que acaso el tiempo no sea soleado… De toda forma, el deseo es que puedas tener un muy Feliz Día de la Madre. Gracias.

* Mabel Burín es doctora en psicología clínica, especialista en estudios de genero y salud mental. Directora del área de género y subjetividad de la Universidad Hebrea Argentina Bar Ilan Es autora de los libros “Estudios sobre la subjetividad femenina. Mujeres y Salud Mental”(1987) “El malestar de las mujeres. La tranquilidad recetada (1990), “Género, Psicoanálisis, Subjetividad”(1996), “Género y Familia”(1998) y “Varones, género masculino y subjetividad” (2000).

http://lasamericasblog.blogspot.com.ar/2012/05/dia-de-la-madre.html

http://www.ilo.org/dyn/gender/docs/RES/292/F61986410/Romper%20el%20techo%20de%20cristal.pdf

http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_de_la_Madre

OIT: ROMPER el techo de cristal – Las mujeres en puestos de dirección – Actualización – 2004 – Oficina Internacional del Trabajo, Ginebra.

http://www.iadb.org/es/noticias/articulos/2012-10-15/diferencia-salarial-entre-hombres-y-mujeres,10155.html