Tiempos modernos, consumo extremo y privacidad sin resguardo

En la era digital actual, todos hacemos uso de las nuevas tecnologías que prometen hacernos más amenas las tareas de la vida diaria.  Buscamos y comprendemos más fácilmente información multimedia, consumimos datos pertenecientes a múltiples fuentes y queremos estar online y comunicados permanentemente para sentirnos más cerca de nuestros seres queridos. También nos divertimos compartiendo datos propios tales como nuestros restaurantes favoritos o las fotografías que tomamos cuando nos fuimos de vacaciones. Son las TICs aquellas que satisfacen las necesidades de comunicación, información, entretenimiento e incluso formación y que hacen imposible recordar cómo era nuestra vida antes de que nos viéramos inmersas en ellas. Sin embargo, el uso que se hace de ellas, a veces suele ser hasta excesivo para los propios usuarios.

En Internet, existen más de 1.500 millones de personas que interactúan, difunden y promueven un amplio caudal de datos. Según la encuesta patrocinada por Intel denominada Etiqueta Móvil 2012, 9 de cada 10 adultos opinan que las personas comparten demasiada información en línea sobre sí mismos pero, un 85% lo hace diariamente y un 23% lamenta si no puede publicar sus novedades al menos una vez al día.

Bajo la nueva modalidad de estar en permanente contacto con dispositivos móviles, las posibilidades de relacionarnos con nuestros seres queridos aumentan y, así, nos sentimos más cerca de ellos.  De hecho, un 46% de los encuestados afirmó que si no fuera por Internet,  no sabría qué es lo que ocurre con su familia y amigos. Además, un 33% asegura que se siente más cómodo compartiendo información a través de Internet que en persona.

El escenario digital es infinito y nos ofrece la capacidad de crear y compartir nuevas ideas, sin embargo, no todo es lo que parece ni todo lo que publicamos es completamente cierto. En Internet, podemos tentarnos de distribuir información que poco se asemeja a nuestra realidad.  Efectivamente, 1 de cada 5 adultos, reconoció haberlo hecho alguna vez, mientras que un 27% admite tener una personalidad diferente online que en persona.

Malos hábitos

La encuesta Etiqueta Móvil de Intel® destaca el hecho de que las personas están aún intentando equilibrar los beneficios de la tecnología móvil con los aspectos negativos de la misma, es decir, aún todos todavía tenemos momentos de malos modales en su uso: un 81% de los entrevistados coincidió en que el uso de los dispositivos móviles está empeorando cada vez más –un 6% más que el año anterior-.

Las tres principales manías resaltadas por los estadounidenses son:

v Escribir mensajes de texto mientras se conduce (77%).

v Hablar por el dispositivo en voz alta en lugares públicos (64%).

v Dejar el dispositivo en un volumen muy alto en lugares públicos (55%).

En este punto, podemos encontrar coincidencias entre los usuarios norteamericanos y los argentinos. Según un estudio, entre los vehículos particulares que circulan por Buenos Aires diariamente –alrededor de 1.800.000-, existe aproximadamente 174.000 de ellos que usan su celular mientras conducen, simultáneamente y constantemente[2] ocasionando distracciones que pueden generar en accidentes de tránsito.

Además, en la ciudad de Rosario, ante las quejas de algunos usuarios del transporte público por el volumen alto de los celulares de otros pasajeros, ya hubo propuestas para realizar campañas de concientización para erradicar esta conducta.

Datos personales y vulnerabilidad empresarial

En el afán de compartir lo que les sucede y ante el crecimiento de las compras de dispositivos móviles, algunos usuarios olvidan proteger su imagen que luego los podrá perjudicar a la hora de buscar, por ejemplo, un nuevo empleo. Incluso, aunque las personas se cuiden de la información que puede exponerlos, el robo o pérdida de computadoras y smartphones es una de las causas más frecuentes del fenómeno conocido como fuga de datos.

A medida que continúe aumentando el consumo de dispositivos móviles por sobre el de las PCs, habrá más información confidencial disponible en ellos.  Los trabajadores se desplazan por la ciudad con sus smartphones, tabletas o notebooks corporativas y las compañías, en muchos casos, aún no los administraron o protegieron correctamente.  Esto puede llevar a incrementar las pérdidas de datos, generando pérdidas muy importantes para las organizaciones.

Por este motivo, las empresas líderes del mercado comenzaron a trabajar diseñando nuevas tecnologías que le proporcionen esta protección a los usuarios y a las empresas. Intel®, por ejemplo, creó Identity Protection y Anti-Theft, tecnologías que vienen pre instaladas en los dispositivos Ultrabook™ y que le proporcionan a los consumidores la tranquilidad de que existen protecciones instaladas para aumentar la seguridad de su contenido personal online, así como sus datos y bienes almacenados en el dispositivo.

Para informaciones adicionales de la encuesta Etiqueta Móvil de Intel®, visite la página: www.intel.com/newsroom/mobileetiquette.