GM acomete una nueva
generación de vehículos compartidos, más seguros y no contaminantes
La era del coche individual puede estar llegando a su fin, al menos en las
grandes ciudades.
El MIT ha desarrollado un modelo de automóvil que rompe con 100 años de historia y del que General Motors va a construir este año el
primer prototipo.
Se trata un coche compartido por muchos usuarios que se recoge a la puerta del Metro, como si fuese un carrito de supermercado, y que
cada conductor puede personalizar a su gusto en una serie de cometidos.
Además, no tiene un motor convencional, ya que toma la energía de sus ruedas robotizadas.
No contamina y es mucho más seguro y simple que los coches tradicionales.
La gran duda es si esta tecnología tendrá suficiente fuerza para cambiar uno de los hábitos sociales más arraigados: el coche personal
a la puerta de casa.