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Seguir leyendo //El GEOV, un prototipo de generador eólico de eje vertical diseñado y construido por el INTI, ya se encuentra en funcionamiento. Está plantado en una chacra cercana a Mar del Plata y tiene por delante un período de prueba de al menos seis meses.
Ya soportó firme una tormenta, y el 27 de noviembre pasado comenzó a generar electricidad. Son las buenas nuevas del aerogenerador de eje vertical diseñado y construido por el INTI -llamado Proyecto Geov- que está pasando su prueba de fuego en un campo del partido de General Pueyrredón, Provincia de Buenos Aires. “El prototipo reaccionó tal como previmos en los objetivos generales del proyecto, aunque estamos en la etapa de prueba todavía”, detalla el Doctor Raúl Mingo, Director del flamante Centro Aeronáutico y Espacial del Instituto. “Nos quedan la reingeniería y las mediciones para ver qué potencia genera de acuerdo a las distintas características del viento”, agrega. El Geov fue “plantado” en el lugar en septiembre pasado y, antes de ponerlo a funcionar en forma “muy cercana a lo óptimo”, hubo algunos inconvenientes que fue preciso solucionar. “Tuvimos que probar tres configuraciones distintas del sistema de arranque, llamado savonius”, explica Raúl Mingo. Los savonius son los cuatro paneles de chapa curvados en forma “s” que están pegados al eje vertical del Geov. El especialista destaca que fueron el propietario del campo, Adalberto Domínguez, -un gran colaborador de este proyecto- y su gente quienes terminaron de mejorar el arrancador, al cambiarle “la forma y la disposición, por lo que ahora gira con mucha más eficiencia”. Igualmente, todavía siguen con el proceso para llegar al formato óptimo de esas piezas. Además, el responsable del aerogenerador destaca especialmente el aporte de la “experiencia técnica y la buena voluntad que pusieron de sí para materializarlo” los Centros del INTI de Córdoba, Mecánica, Plásticos, Caucho y Mantenimiento.
Dos kilovatios limpios
Pero el Geov no está solo. Raúl Mingo y su grupo están poniendo también manos a la obra en un sistema de medición para cuantificar la eficiencia de los generadores eólicos, que “en un futuro permitiría al INTI certificarlos o ayudar a los emprendedores locales a saber cómo funcionan sus equipos. Y además nos va a servir a nosotros para testear el nuestro”. Se trata de un sistema electrónico para medir los parámetros del generador eléctrico incluido en el molino, en función de las condiciones meteorológicas -como viento, temperatura y presión-, todo bajo la norma internacional ICE-61400-12-1. “Al ‘medidor’ lo vamos a probar con un aerogenerador que ya existe en el mercado -explica el Doctor Mingo- porque necesitamos optimizar al mismo tiempo dos prototipos: uno es nuestro molino y el otro es el sistema de medición en sí”. El especialista reconoce que los tiempos se les dificultaron “un poco porque para este sistema usamos material importado que tiene su complicación traer”. “Hipotéticamente -agrega Mingo-, el Geov va a producir dos kilovatios de electricidad con vientos de 40 kilómetros por hora, pero el viento sopla cuando quiere, así que la medición completa puede llevarnos cuatro, seis u ocho meses”. Otro detalle es mejorar los sistemas de protección, ya que el Geov estará obviamente expuesto a polvo y lluvia en forma permanente. Por ahora, el titular del Centro Aeronáutico y Espacial del INTI confiesa: “estamos bastante conformes, porque ya soportó una tormenta. Igual, no cantamos victoria. En el INVAP nos contaron que ellos estuvieron cuatro años y medio antes de culminar la optimización del modelo que se instaló en el Michacheo. Todavía nos falta”. Mientras tanto, el Doctor Mingo revela que la “impresión” de su equipo es que, cuando culminen los ajustes, el aparato logrará entregar dos kilovatios de potencia nominal tal como habían previsto, aunque todavía están trabajando para precisar bajo “qué régimen de vientos los va a producir, en cuál va a arrancar y cuáles son los vientos que representan un peligro para el molino”. El especialista dice que sólo con esos datos a mano van a poder definir la verdadera performance del dispositivo eólico, que está pensado “para el Sur, no para la zona de Mar del Plata donde lo estamos probando”. Y termina: “La idea es que sea un molino todo terreno”. Mientras tanto, el Geov sigue firme en la chacra, llenando la cisterna de agua.
“El eje vertical es la salida tecnológica más fácil”
El experto del INTI que desarrolló esta variante de aerogenerador, el Doctor Raúl Mingo, precisa porqué y cómo se prevé transferirlo para uso comunitario.
¿Por qué el INTI pensó en desarrollar un aerogenerador como el Geov?
El Proyecto Eólico Geov surgió a mediados de 2007 porque había una vacante tecnológica dentro del INTI en el tema de aerogeneradores y simultáneamente se estaba generando una demanda de esta tecnología desde la coyuntura internacional, por la crisis del petróleo y la necesidad de asistir a zonas de debilidades energéticas, bajo el concepto moderno de generación distribuida.
¿Y por qué un aerogenerador de eje vertical?
Para encolumnar toda la experticia técnica del INTI en un proyecto eólico, elegimos un molino de eje vertical de dos kilovatios porque es una tecnología que no es tan difundida como la de los generadores de eje horizontal –aunque actualmente también hay algunos desarrollos privados- y además tiene sus ventajas en determinadas situaciones. Una de las principales es que generan
energía independientemente de la dirección del viento, y en lugares donde el viento es cambiante esto resulta importante. Por el contrario, un aerogenerador de eje horizontal tendría que girar para enfrentarse al viento. Además, los de eje vertical son más robustos y la otra ventaja es que toda la parte eléctrica está abajo, cerca del piso, con lo cual no se requiere una infraestructura importante para el mantenimiento. Entre las desventajas está que tiene una menor actuación aerodinámica porque justamente está más cerca del piso.
Para calificar el desempeño de un molino hay que ponderar muchas variables, incluyendo el costo del mantenimiento y las condiciones del viento: si uno lo va a utilizar para generar corriente de alta calidad para uso domiciliario es una cosa, y si lo usa para bombeo de agua es otra. Como en todo, decir que es mejor uno que otro depende del análisis global del lugar. Lo que sí, tanto de eje vertical como de eje horizontal, son tecnologías que están en vigencia, aunque la primera se probó en la Argentina en 1980, en forma conjunta con Alemania, en un test del que yo participé. Esta línea fue abandonada, entre otras razones porque la tecnología de eje horizontal está más vinculada con la industria aeronáutica -las palas son similares a las de los helicópteros y las hélices de aviones- pero era y es la salida tecnológica más fácil.
Una vez que estos prototipos sean probados en el campo, ¿cómo se piensa hacer la transferencia tecnológica?
Lo importante es que sea construido por quienes lo necesitan. La idea es ir llamando a varios proveedores, porque en un molino participan muchas tecnologías distintas: desde fabricantes de generadores eléctricos hasta un astillero que haga embarcaciones de laminados plástico, más piezas metálicas torneadas. Incluso tiene la torre, que es de caños de acero convencional.
Tenemos todos los mecanismos con sus respectivos planos en CAD y hemos hecho todos los cálculos aerodinámicos, estructurales y dinámicos; está todo armado para ser transferido en su totalidad.
¿Hay alguna otra localidad del país donde esté planeado instalar un molino como éste?
Se nos acercaron algunos pequeños horticultores de El Calafate, Santa Cruz, que vieron la concepción de nuestro molino y les pareció que era muy apto para la zona de ellos; les interesó que no es muy alto -tiene unos 4,20 metros- lo que compensa los fuertes vientos que tienen. Como la localidad tuvo una explosión demográfica, necesitan bombear agua para regar sus cosechas. No
obstante, el INTI no pretende fabricar molinos, sino vitalizar la industria eólica local.
¿Qué costo tendría un aerogenerador terminado?
Lo estamos evaluando, pero calculamos que completo -el molino, con el sistema de control y el de conversión eléctrica- en el mercado no debería superar los $15.000. Claro que ahora viene la parte de optimizar costos, que depende un poco del análisis del mercado.
Más información: www.inti.gob.ar/e-renova
Por Ricardo Mosso, e-renova@inti.gob.ar
Área de Energías Renovables
SABER COMO – INSTITUTO NACIONAL DE TECNOLO… http://www.inti.gob.ar/sabercomo/sc85/inti2.php
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